Pasaje del cuaderno de María, después de su viaje a Venecia:
En el trabajo, el punto más delicado es el trato con los compañeros. Hasta cabe pensar que de la buena o mala calidad de este trato, más que de la facilidad o dificultad del trabajo depende nuestra satisfacción.
Es por eso que con independencia de cual sea su grado de dedicación y esfuerzo, apreciamos por encima de todos a quienes cumpliendo en lo esencial con sus obligaciones, saben mantener el trato en los términos adecuados.
Y en el trato humano, nada gusta tanto como la calma, la receptividad (que apenas se insinúa), el humor (mejor si es banal)… en una palabra: la sensación de levedad.
Es por eso que con independencia de cual sea su grado de dedicación y esfuerzo, apreciamos por encima de todos a quienes cumpliendo en lo esencial con sus obligaciones, saben mantener el trato en los términos adecuados.
Y en el trato humano, nada gusta tanto como la calma, la receptividad (que apenas se insinúa), el humor (mejor si es banal)… en una palabra: la sensación de levedad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario